No recuerdo la frase exacta, pero me permito una reconstrucción:

Hay gente que le tiene miedo a la hoja en blanco.
A mi me pasa al reves,
escribo y después borro con liquid paper;
cuando vuelvo al blanco me tranquilizo.

Y esta sí, recuerdo las pocas palabras, aunque no la escuché puedo creer que fue asi:

"Un blanco y un tinto,
suena sospechoso".

Y esta publicamos:

"Ahora el viejo levanta una botella vacía, la mira
y la admira, y por un extremo de ese tubo de vi-
drio vuelve a espiar el horzonte como ajustando
un catalejo. ¡Ah, bucanero, cuántos mares! En-
tonces escucho que dice:
- ¿Cómo, hijo, cómo se llamaba por Dios Santo,
aquel perfume?

Afuera llueve mientras canto una canción (llueve
lentamente sobre mi desolación), y acá adentro
de esta madera podrida no sé por qué yo sigo
amarrado al nombre de aquel barco a la deriva.
Yo, ¡triste de mí!, yo que quise recalar en mil
puertos y pude haber retenido todas y cada una

de las cosas más bellas del mundo."

Todo por Hector Libertella.